Comencemos hablando sobre la coctelería. Lejos de lo que la mayoría de las personas piensan, no se trata únicamente de mezclar diferentes bebidas para lograr algo innovador. La realidad es que es tanto arte como ciencia.
Y sí, en efecto he dicho ciencia, porque a pesar de que hay muchos factores creativos como la forma en que los diferentes elementos crean la presentación, el sabor o incluso la textura de un cóctel, de la misma forma existen una gran cantidad de factores técnicos que ayudan a hacer de los cócteles una experiencia a disfrutar con todos los sentidos.
Aclararemos algunas cosas sobre este arte a continuación
De acuerdo con la Real Academia Española, la coctelería es el “Arte de preparar cócteles” una definición bastante sencilla de escasas cuatro palabras, aunque ciertamente, no es tan sencilla la buena concepción y preparación de bebidas y cócteles.
Como en todo buen arte en la coctelería se requiere de estudio constante y mucha práctica para dominarla.
Por otro lado, se debe destacar que en los últimos años se ha vuelto bastante común el término Mixología y es usado casi indistintamente a Coctelería.
Pero ¿Cuál es la expresión correcta?
La RAE no tiene una definición formal para Mixología. Sin embargo, en el ámbito de los Bartenders, Mixólogos, Barmans, Barwoman o como se les quiera llamar, se entiende Mixología como un término “fino” para aquellas personas que poseen un amplio conocimiento sobre la creación y preparación de bebidas y cócteles.
Entonces ¿Son lo mismo?
No exactamente, si bien ambas comparten el objetivo de crear bebidas de sabores exquisitos que nos hagan despertar todos los sentidos, no lo hacen con el mismo enfoque.
Hablando específicamente de la Coctelería, nos referimos a los aspectos técnicos y la ejecución de las recetas clásicas y modernas.
Dicho de otra forma, quien oficia como Bartender prepara diversas bebidas y cócteles, además de interactuar con los clientes, de modo que se comporta de manera similar a un anfitrión del cliente o consumidor final.
En cuanto a la Mixología, se centra en el estudio de la mezcla de bebidas y consiste en investigación y aprendizaje de todo sobre los cócteles y bebidas: su origen, su composición, el análisis de los sabores, aromas, texturas, colores, densidades, niveles de alcohol, buscando un equilibro en el producto final.
Con esto en mente, podemos decir que el accionar mixológico es una de mezcla entre ciencia y arte, que estudia todo lo referente a los productos, bebidas y técnicas existentes, además, se aventura a ir más a allá en busca de lo nuevo, sin olvidar que el fruto de su trabajo será ejecutado por un o una bartender.
Para resumir, el coctelero ejecuta e interactúa con el cliente de modo que es la figura que habitualmente vemos detrás del bar. En cambio, el mixólogo es el responsable de desarrollar nuevas y deliciosas bebidas.
Cuando pensamos en un bartender, barwoman, barman o mixólogo, la imagen más común que viene a nuestra mente es la del chico o chica detrás de la barra agitando un cóctel.
Y bien, como todo buen especialista, cada bartender requiere de algunas herramientas básicas para la preparación de deliciosas bebidas. Desde luego, la coctelera es uno de los más conocidos por todos, incluso aquellos que no tienen que ver con este arte, pero no es el único.
Ahora te contaré algunas de esas herramientas que toda persona que desee preparar una gran bebida debe tener a la mano:
La más conocida de todas las herramientas de cualquier bartender y definitivamente su amiga inseparable.
Son recipientes especialmente diseñados para combinar los ingredientes líquidos de un cóctel o bebida y que además permite enfriarlos.
Seguramente te sorprenderá saber que existen varios tipos, sin embargo, las más famosas son la coctelera francesa (con su variante de tres piezas) y la coctelera americana, que consiste de dos vasos de tamaño diferente.
Algo que se debe tener siempre en cuenta es que las cocteleras francesas y variantes de las mismas tienden a atascarse si no se coloca bien la tapa, de modo que se debe ser especialmente cuidadoso con este tipo.
Usualmente están formados por dos conos unidos por la parte más delgada siendo el más común el que posee una medida de 15 ml por un lado y 30 por el otro. Permite obtener medidas precisas cada vez, lo cual es importante cuando deseas sacarle el mayor provecho a tu destilado favorito.
Es una cuchara con un mango largo y usualmente trenzado. Es perfecta para mezclar líquidos directamente en el vaso de servicio, y además, su mango trenzado es ideal para para verter algunas bebidas gaseosas cuidando sus burbujas.
Es un vaso más grande que las cocteleras, no posee tapa, está comúnmente hecho de cristal o acero inoxidable. Su función principal es ser usado como recipiente para aquellas bebidas que no necesitan agitarse, y además, permite enfriar los ingredientes.
Es un mazo de mortero especialmente diseñado para extraer el jugo de las frutas o hierbas, y puede ser utilizado en el mismo vaso en que se servirá la bebida. Un ejemplo perfecto de uso del mortero de coctelería es en la preparación de un Mojito.
Es una herramienta especialmente diseñada para colocar las bebidas preparadas con la coctelera. Cuenta con un mango corto que se extiende por los laterales para mantenerlo en su lugar. Usualmente está construido en acero inoxidable.
Como es de esperarse, las medidas son uno de los aspectos más básicos de la preparación de bebidas y cócteles, tanto alcohólicas como no alcohólicas.
En este maravilloso mundo de la coctelería tenemos algunos términos que debes conocer para preparar tus bebidas favoritas como todo un profesional. Comencemos desde la más pequeña:
Es una medida que corresponde a entre dos y tres gotas. De modo que si queremos agregar una pizca de vainilla por ejemplo, sólo colocaremos en nuestra bebida dos o tres gotas. Por su parte, un Dash corresponde a una medida un poco más grande de entre seis y ocho gotas de un ingrediente.
Un Shot corresponde a una onza, que en mililitros serían 29.5 ml para ser exactos, pero siempre podemos redondear a 30 ml. Para las demás medidas tomaremos 30 mililitros iguales a 1 onza.
Una copa por su parte corresponde a unas 8 onzas, unos 240 mililitros aproximadamente
Es una de esas medidas icónicas y célebres, incluso en el cine particularmente en el Señor de Los Anillos todas las cervezas son pintas y corresponden a 16 onzas o lo que es lo mismo unos 480 mililitros aproximadamente.
Esta es una medida bastante especial. Para lograrla debemos dividir el envase en el que se servirá la bebida imaginariamente.
Por ejemplo, si una receta estipula agregar ¼ parte de tequila, deberemos dividir imaginariamente el volumen del vaso en 4 partes y llenar una de ellas con tequila.
Sin embargo, para evitar hacer cálculos visuales y mentales te recomendamos consultar la siguiente tabla de equivalencias. Si eres bien perfeccionista notarás que las equivalencias no son 100% exactas, pero de esta forma será más sencillo preparar tus cócteles favoritos.
Partes | Mililitros | Onzas |
⅓ partes | 10 ml | ⅓ oz |
½ partes | 15 ml | ½ oz |
1 parte | 30 ml | 1 oz |
2 partes | 60 ml | 2 oz |
3 partes | 90 ml | 3 oz |
4 partes | 120 ml | 4 oz |
Ahora sabes que la coctelería y la mixología tienen la finalidad de crear bebidas maravillosas, tanto alcohólicas como no alcohólicas, pero cada una de ellas lo hace a su manera, la coctelería ejecutando y la mixología creando, investigando y desarrollando.
Así mismo conocer qué herramientas debes tener a la mano para crear tus bebidas como todo un profesional y no que no sólo debes limitarte a una coctelera o un jigger, aunque suele ser más que suficiente para comenzar a preparar tus bebidas.
Con herramientas como la cuchara de bar y el mazo de coctelería podrás llevar tus preparaciones a otro nivel.
Por último, también conoces las medidas más usadas por profesionales de la barra, lo que te permitirá tomar cualquier receta y asegurarte que lograrás grandes aromas y sabores exquisitos para tí y con quienes compartes esos gratos momentos cada vez que las intentes.
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